Por Isadora Soares

Con sus 77 km de extensión, el hermoso paisaje del río San Pedro, en el sur de Chile, esconde la lucha silenciosa de la región contra el ya avanzado proyecto de construcción de la Central Hidroeléctrica San Pedro, proyecto que está interrumpido desde 2009. 

La animación de poco más de cinco minutos de la red Mesa Ciudadana por un río San Pedro sin represas (@riosanpedrosinrepresas) explica de manera didáctica todo el conflicto en el río y por qué los habitantes de la región deben rechazar la construcción a favor de la integridad de toda la cuenca.

“Através de este video, queremos que toda la ciudadanía sepa las razones por las que debemos rechazar el proyecto de la Central Hidroeléctrica San Pedro. Se trata de una amenaza para las personas que habitan las riberas del río, atenta contra la biodiversidad existente en la cuenca, pone en riesgo el suministro de agua potable para la ciudad de Valdivia y amenaza con terminar con el turismo local. Demandamos que el Servicio de Evaluación Ambiental rechace este proyecto.”, explican desde la Fundación Plantae, ONG parte de la Mesa Ciudadana.

“El río San Pedro es conocido mundialmente por su rica ictiofauna y su importancia centenaria para las comunidades que dependen de él para sobrevivir. Vemos la construcción de la Central Hidroeléctrica San Pedro con alta preocupación debido a la evidencia de riesgo geológico y los catastróficos efectos de un posible terremoto, como ocurrió en los 60s,” dijo Monti Aguirre, Directora del Programa de América Latina de International Rivers.

Según la Fundación Plantae en Chile, estas son las principales amenazas que causaría la construcción de la Central Hidroeléctrica San Pedro:

1. Suministro de agua potable para  la ciudad de Valdivia 

Una de las plantas de agua potable de Valdivia se ubica aguas abajo del río San Pedro, en el sector de Collico en el río Calle-calle. Esta planta se está convirtiendo en la mayor fuente de agua potable de Valdivia. Lamentablemente, ya se ha visto afectada durante los últimos años por el cambio climático (aumento del nivel del mar y disminución de caudal del río), disminuyendo la cantidad y calidad del agua, implicando un mayor costo para las y los habitantes de la ciudad. La construcción de la Central Hidroeléctrica San Pedro podría hacer peligrar más aún el suministro de agua potable de Valdivia, ciudad que ya está afectada por años de sequía. La empresa sanitaria ha demostrado su preocupación por la problemática, mencionando explícitamente al proyecto hidroeléctrico de Colbún S.A. como amenaza para la provisión de agua de la ciudad. 

Colbún S.A. propone en su último estudio de impacto ambiental aumentar en un 25% el consumo de agua del río San Pedro. ¿Cómo pretende Colbún asegurar el agua potable de las y los valdivianos, si el cambio climático llegó para quedarse, y la empresa pretende ocupar cada vez más agua para la generación eléctrica en un escenario de cada vez menos agua? 

2. Paisaje y Turismo regional y local 

El río Calle-Calle y río Valdivia nacen del río San Pedro. La economía basada en el turismo y la identidad local toman al río como eje de desarrollo. El turismo regional es una importante vía de ingresos, que ha crecido sostenidamente en el tiempo, alcanzando alrededor de 350 mil visitantes anuales en la Región de Los Ríos. Múltiples prestadores de servicios turísticos, de alimentación, alojamiento y transporte, se benefician de esto. Según cifras actualizadas de la Subsecretaría de Turismo, cada vez más personas se interesan por visitar la zona de lagos y ríos de la Región, por lo que cualquier afectación sobre estos atractivos turísticos, afectará la visitación y como consecuencia, la economía local y regional. 

La represa en el río San Pedro, creará una zona de sacrificio ambiental, eliminando un ecosistema único en biodiversidad, belleza y paisaje, reemplazándolo por un ecosistema artificial y homogéneo, impactando el turismo, economía y bienestar regional. 

El proyecto probablemente es de alta rentabilidad privada, pero ¿qué estudios respaldan la valoración o rentabilidad social del proyecto y el costo de oportunidad de realizarlo? Esto considerando que se destruirá el atractivo regional más importante para el desarrollo del turismo aventura en aguas blancas, kayak, rafting, pesca, y turismo de intereses especiales, cada vez más relevantes para los habitantes y visitantes de la localidad y la región, y de enorme potencialidad futura. 

3. Riesgo de desastre, peligro para las personas y traumas psicológicos 

Colbún S.A. pretende construir la Central Hidroeléctrica San Pedro en el geológicamente inestable valle del río San Pedro. En el mismo lugar donde, tras el terremoto de 1960 y anteriormente en 1575, las laderas del río San Pedro sucumbieron y bloquearon el cauce, amenazando durante meses la vida de las personas en la ciudad de Los Lagos, Valdivia y poblados ribereños, episodio conocido popularmente como “Riñihuazo”. A este riesgo por inestabilidad de laderas, se suma la influencia de actividad volcánica, dada por el volcán Mocho-choshuenco, considerado activo y que registra violentas erupciones, y una falla geológica potencialmente activa (Llecué) debajo del área del embalse. La comunidad científica internacional ha concluido que proyectos de embalse son capaces de producir terremotos artificiales, siendo a nivel mundial el tercer factor más relevante para su ocurrencia y el primero a nivel sudamericano.Es cuestionable entonces que la empresa no haya presentado públicamente una modelación hidráulica en caso de rompimiento de la represa. Esto llama la atención, ya que durante el “Riñihuazo”, y por el riesgo que constituía, se decidió dinamitar un puente, varias veces más pequeño que una represa. 

La construcción de una represa en este escenario de alto riesgo de desastres naturales que pueden implicar su ruptura o un tsunami en el embalse, genera incertidumbre sobre la seguridad de las personas, su salud mental y sus vidas. ¿Cómo es posible asegurar que eventos catastróficos no rompan la represa o un tsunami de embalse no pase sobre ella, si no se han presentado todos los estudios de evaluación de riesgos que los servicios públicos y la ciudadanía han solicitado? Se solicita una modelación de ambos escenarios (ruptura y tsunami) frente a terremotos de gran magnitud (iguales y mayores al de 1960), incluyendo entre otras cosas, el efecto del deslizamiento masivo de laderas sobre el embalse, y movimiento brusco y desestabilización del terreno que soporta la represa. 

4. Biodiversidad y ecosistema 

El río San Pedro es una fuente invaluable de biodiversidad y de belleza paisajística única. En sus aguas se encuentran especies de peces que solo habitan en esta cuenca, como el tollo de agua dulce (Diplomystes camposensis), y algunas especies que se encuentran en peligro de extinción, como el huillín (Lontra provocax), y el cuervo de pantano (Plegades chih). El río San Pedro-Calle Calle-Valdivia es un ecosistema interconectado, un corredor biológico binacional que une 11 lagos. Si se corta el corredor con una represa, inevitablemente habrá impactos ambientales aguas arriba y aguas abajo. 

El valle del río San Pedro es Reserva de la Biósfera, y contiene tres sitios prioritarios de conservación de la biodiversidad que incluyen el corredor ribereño y bosques aledaños, y un programa intermunicipal entre Los Lagos y Máfil de “Paisaje de Conservación del Valle del Río San Pedro”. 

Es fundamental trabajar para la conservación de esta biodiversidad, puesto que se encuentra más amenazada que nunca. El proyecto Central Hidroeléctrica río San Pedro se aprobó en 2008, hace 13 años, por lo que se encuentra obsoleto respecto al estado de conservación de las especies, muchas actualmente vulnerables o en peligro de extinción, y obsoleto respecto a las especies invasoras que pueden verse beneficiadas por la construcción del embalse. Desde el 2013 hay registros del alga invasora didymo en el río, además de la proliferación de salmónidos. Ambas especies se ven beneficiadas por la construcción de represas, y es un fenómeno que afectará sin precedentes a la flora y fauna nativa. ¿Cómo hará el titular para no afectar la biodiversidad que está mucho más amenazada que hace 13 años, y cómo hará para evitar la proliferación y propagación de especies invasoras que impactan negativamente a las especies nativas?

Foto principal: Río San Pedro – Crédito Pablo Lloncón – Fundación Plantae